Niza, capital de la Costa Azul, fue antiguamente el principal destino turístico de los ingleses durante los meses de invierno, pero hoy, es imposible pensar en visitar Niza sin estar acompañado de un sol radiante y un cielo de infinito azul que se una con el Mediterráneo. Esta ciudad es el destino ideal para aquellos que quieran combinar playa, sol, paseos marítimos y turismo cultural. Cerca de las fronteras españolas e italianas, es el destino perfecto para aquellos que quieran vivir la belleza de esta zona de Francia.
Los campings en Niza
Los campings en Niza se encuentran cerca de la ciudad, rodeados de exuberante naturaleza mediterránea, que ofrecen paisajes de ensueño. Los campings están ubicados en el interior de la ciudad o cerca el mar, como la mayoría de los campings en la Costa Azul, pero, en cualquier caso, todos ofrecen servicios de alta calidad y altos estándares, desde animación en el camping hasta restaurantes típicos de la zona. Estas pequeñas joyas serán el lugar perfecto para refugiarse del estrés diario de las grandes ciudades. Aquellos que amen las actividades al aire libre y el aire puro, Niza es su destino. Aquí reina un ambiente muy agradable y cordial, y podrás elegir entre alquilar una carava o un bungalow.
Desde tu camping, podrás desplazarte a cualquier parte de la ciudad sin ningún problema. Hablando de la ciudad, es imposible mencionar Niza sin hablar del Paseo de los Ingleses con sus famosas sillas azules. Con 7 kilómetros de longitud, formará parte de tu itinerario, ya sea a pie o sobre dos ruedas.
Antes de que lo digas tú te lo contamos nosotros: sí, Niza parece sacada de Italia. Sabes lo que eso significa, ¿verdad? Efectivamente, el helado de Niza es de carácter italiano, y a quién no le gusta eso. O unas bonitas flores en alguno de sus mercados tan autóctonos. O unos bombones de algunas de sus confiterías. Lo que está claro es que Niza es para relajarse caminando por sus bellísimas calles, observando su maravillosa arquitectura con esos colores tan vivos. Si no te dan miedo las alturas, puedes subir hasta el parque del antiguo castillo de Niza y admirar sus vistas. Si, en tu camino, escuchas un cañonazo, no te asustes. Todos los días a las 12 del mediodía se dispara un cañonazo desde lo alto de la colina del castillo. Cuenta la historia, que un escocés afincado en Niza, en el año 1861, instaló un cañón con sus propios medios para pedir a su mujer que preparara la comida.
Niza se encuentra en plena costa Mediterránea, a tan solo 20 kilómetros de Mónaco y 30 de Italia, y es una de las ciudades de la turística Costa Azul.
Al haber estado bajo las influencias italianas, la gastronomía de la ciudad gala es una de las pocas que cuenta con nombre propio: la cocina nizarda.
Viajar a Niza
Afortunadamente, Niza cuenta con su propio aeropuerto y estación de tren, por lo que podrás llegar perfectamente a tu destino si no quieres viajar en coche o alquilar uno.